Por primera vez desde hace dos años, efectivos del ejército sirio y cientos de civiles entraron en el centro de Homs tras la completa salida de los milicianos que se apoderaban de la zona.


La televisión oficial siria ofreció imágenes de los primeros civiles que se adentraron en los barrios de Bustan al Diuan, Uarshe, Al Hamidiya y Bab Hud, en la parte vieja, después de que el Ejército asegurara esas zonas tras la retirada de todos los rebeldes. Los ciudadanos que venían a ver sus casas daban muestras de alegría a pesar de los destrozos y la destrucción que los armadas provocaron.

El gobernador de Homs, Talal al-Barazi, anunció la salida de los últimos milicianos según el pacto acordado. Al-Barazi no descartó que en los próximos días “presenciemos otros acuerdos similares”.

Una red de túneles y fábrica de cohetes

Los militares sirios descubrieron durante las operaciones de “limpieza” dos hospitales de campaña que contenían grandes cantidades de medicamentos y material sanitario, asimismo, encontraron una red de túneles debajo de las casas que era utilizada por los terroristas en sus acciones criminales.


En el barrio Bab Hud, “una unidad del Ejército desactivó varios artefactos explosivos y encontró una fábrica de cohetes de mortero y grandes cantidades de material explosivo, además de la red de túneles que pasaba por debajo de las casas del barrio”, informó la agencia SANA.

Convoy de ayuda humanitaria

Mientras tanto, el convoy de ayuda humanitaria llegó a las localidades Nubal y Zahraa, al norte de Alepo, asediadas por los grupos armados.


“Doce vehículos cargados de alimentos entraron en los pueblos de Nubal y Zahra acompañados por cinco coches de la ONU después de que el “Frente Islámico” prometiera no atacar al convoy”, indicó una fuente relacionada.

La fuente añadió que los habitantes de los dos pueblos asediados por los rebeldes reclamaron la liberación de los secuestrados”.