Bajo el lema “La Nación Islámica: Retos y medios” se abrió este miércoles la primera sesión de la 28 Conferencia Internacional de Unidad Islámica en la capital de la República Islámica de Irán, Teherán, patrocinada por el “Foro Mundial para el Acercamiento entre Escuelas Islámicas”.


Este evento que se extenderá hasta el 9 del presente mes, cuenta con la participación de unos 600 delegados, de 65 países.

El presidente iraní, Hassan Ruhani, en su discurso de inauguración, instó a fomentar la unidad islámica frente a los tiranos a el terrorismo.

“Por beneficio de la nación islámica debemos unirnos y alejarnos de las discrepancias y la división”, dijo. “El Islam es la religión de la tolerancia, esto nos obliga a tomar postura contra la violencia y el radicalismo”, agregó.


Ruhani criticó el “silencio del mundo islámico” ante lo que ocurre en Palestina, las guerras y la destrucción en Siria y Líbano y la brutal agresión contra Iraq subrayando que “todos somos responsables por lo que pasa en el mundo islámico”, y que “la unidad no se consigue con palabras sino con hechos”.

Hezbolá

Por su parte, el vicesecretario general de Hezbolá, Sheij Naim Kassem, aseguró que los principales temas a enfrentar son “Estados Unidos y su plan de dominar la región, la entidad sionista que ocupa Palestina y los takfiríes que asesinan a sunitas y chiitas”.

Asimismo Kassim indicó que Hezbolá se enfrenta a la entidad sionista, que “no entiende más que el lenguaje de la fuerza” y que “salió humillado de Líbano”, en alusión a la liberación del sur de Líbano en el año 2000, y combatirá contra los grupos terroristas de “doctrina takfirí” y contra la “dependencia estadounidense”.

Sheij Kassem concluyó afirmando que “la línea unificadora vencerá al final”.