El presidente sirio, Bashar al Assad, afirmó que la situación en Siria es actualmente "más peligrosa" a causa del apoyo político prestado al terrorismo por varios países y dirigentes, en especial de Occidente, y la falta de una organización mundial activa que pueda evitar que "un país utilize el terrorismo por procuración para destruir a otro".

Al assad señaló, en una entrevista con el diario sueco Expressen, que el “terrorismo en nuestra región, y en el mundo, se basa en la ideología wahabí”, y añadió que es “un problema a nivel mundial”.

“Si miramos el curso de la guerra durante los cuatro años pasados, vemos que a veces ganamos y otras perdemos, esto depende de muchas cosas, entre ellas elementos externos, como el apoyo logístico que reciben los terroristas”, señaló. En el caso de Idleb, “el factor principal para que los terroristas pudieran tomar la ciudad fue el gran apoyo prestado por Turquía, logístico y militar, añadido al apoyo monetario recibido por Arabia saudí y Qatar”, dijo al Assad.


El presidente sirio consideró que “Turquía, arabia Saudí y Qatar, no son países independientes, sino realizan planes de Estados Unidos. Algunas veces obran por odio o venganza, pero no tienen proyectos propios”. Esta conducta no está relacionada sólo con el conflicto sirio, “ellos mismos apoyaron a los terroristas en Afganistán, y siguen fomentando el terrorismo en Europa mediante la ideología wahabí y el radicalismo”, añadió.

“La ideología wahabí es la base de todo terrorismo en el mundo”, reafirmó.

Al Assad defendió el plan del enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, destinado a acabar con los combates en Alepo (en el norte del país), y aclaró que dicho plan es “coherente con nuestros esfuerzos para conseguir reconciliaciones en toda Siria”.

Durante la entrevista, difundida este viernes, Al Assad dijo que los líderes terroristas más peligrosos en nuestra región “vienen de países escandinavos”, y recordó que hace años advirtió de las acciones terroristas que podían originar en Europa, calificando los ataques suicidas ocurridos en Francia, España, Copenhague y Londres, como la punta del iceberg. “Mientras no se tome medidas contra la ideología wahabí, debemos esperar más ataques de este tipo”, aseveró.