La aviación saudí aumentó sus ataques contra zonas residenciales y plazas populares en Yemen desde las primeras horas de la mañana de este viernes. Al menos 17 civiles han muerto en los bombardeos en Saada y el casco viejo de la capital Sanaa, mientras, fuerzas del Ejército yemení y de los Comités Populares atacan bases militares de los agresores en la frontera.

Las casas del casco viejo de la capital yemení, Sanaa, han sido blanco de los ataques aéreos esta mañana. Cinco viviendas han sido destruidas totalmente, seis personas han muerto y muchos han resultado heridos, entre ellos mujeres y niños, en el bombardeo.


En la provincia de Saada (norte), la aviación bombardeó un mercado popular, donde al menos once personas han perdido la vida, según las primeras informaciones, y un número no determinado han sido heridos.

La aviación militar saudí, en su constante agresión desde más de dos meses, también bombardeó zonas históricas en Sanaa y otras provincias, lo que demuestra el odio saudí hacia el pueblo yemení, su historia y su patrimonio.

Por otro lado, la situación humanitaria en Yemen se está deteriorando cada vez más, los ciudadanos tienen dificultada para conseguir sus necesidades básicas.

El 80 % de los ciudadanos, es decir más de 20 millones de personas, necesitan ayuda humanitaria urgente, según un reciente informe de la ONU.