El líder supremo de la República Islámica de Irán, el gran ayatolá Alí Jamenei, ha  criticado a Arabia Saudí por su actuación tras la masacre de la semana pasada cerca de La Meca en la que murieron más de un millar de peregrinos, entre ellos 464 iraníes, además de 241 iraníes desaparecidos, afirmando que “la respuesta iraní sería muy dura y contundente si decidiera responder”.

“Los funcionarios iraníes siguen de cerca el caso de las víctimas y los heridos, mientras los funcionarios saudíes no cumplen con sus responsabilidades”, ha denunciado.

Durante un acto con graduados en la academia del Ejército, Jameneí dijo que “la ignorancia (de Al Saud) convirtió a los días festivos, de Al Adha y Al Ghadir, en funerales después de los sangrientos acontecimientos de Muna”.


“Arabia Saudita no actuó conforme a sus obligaciones en relación con los peregrinos heridos en el incidente, tampoco ha repatriado los cadáveres de las víctimas iraníes", lamentó.

Asimismo reiteró su reclamación de la necesidad de “hacer una investigación a fondo con la colaboración de Irán y otros Estados islámicos”.

De otra parte, aseguró que “la disposición de las Fuerzas Armadas de Irán, no sólo significa su capacidad a vencer al enemigo en la guerra, sino también defender el país de las malas intenciones del enemigo”, y subrayó que dicha disposición “impide que el enemigo se atreva a actuar mal contra el país”.