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Internacional

Daesh trata de hundir la joven democracia tunecina

Daesh trata de hundir la joven democracia tunecina

Los terroristas golpean el turismo, la principal fuente de divisa del país


Túnez, desde su revolución que provocó la caída de Ben Ali en enero de 2011, se enfrenta a un ascenso de la influencia terrorista y es el escenario de la última barbarie de Daeh. Y ya son tres sangrientos atentados en ocho meses.

Acciones que los terroristas llevan a cabo antes de las vacaciones para así golpear la principal fuente de divisa del país: el turismo

Antes de las vacaciones de Semana Santa, en marzo, los terroristas mataron a 60 personas en los atentados del museo del Bardo, en la capital. Tres meses después, en plena campaña de verano, atacaron un hotel en la costa en Port El Kantaoui. En ambos ataques las víctimas fueron principalmente extranjeros. Ahora, tres meses después,  la sangre regresa a las calles de Túnez. Esta vez, un terrorista se inmoló al paso de un autobús de la guardia presidencial tunecina, ataque que ya ha reivindicado el grupo terrorista Daesh.

La primera reacción de las autoridades tunecinas fue cerrar el Aeropuerto Internacional Túnez-Cartago y las zonas turísticas, una decisión urgente y previsible por las autoridades y por los terroristas.

Daesh trata de hundir la joven democracia tunecina

Castigar a la joven democracia

Los terroristas no quieren que la transición política de Túnez tenga éxito. Quieren castigar la joven democracia tunecina, consecuencia de la primavera árabe.

No en vano, la industria turística emplea en Túnez cerca de un 5 por ciento de la población y representa casi un 7 por ciento de su producto interior bruto. Este año, debido a los atentados, podría perder hasta 500 millones de dólares, según algunas previsiones.

Al igual que en París, Malí o Líbano los terroristas atacan para trasladar el miedo a las sociedades democráticas y libres. Sus acciones suelen llevar el sello de los retornados, esos combatientes que abandonan sus países para recibir entrenamiento en Siria e Iraq y regresar a su países para atentar.

Unos 7.000 tunecinos se habrían unido a las filas de Daesh

Un creciente número de tunecinos se han enrolado en las filas de Daesh. La ONU cifra en 4.000 combatientes en Libia y 3.000 en Siria. El Internacional Crisis Group rebaja la cifra total a 4.000. El gobierno, dice 2.000. A finales de 2014, un informe del departamento de Estado de EEUU advirtió de la amenaza para la seguridad regional que supone el elevado número de terroristas en este país árabe.

El último atentado se produce en medio del aumento de la actividad del Ejército, que en el último mes y medio ha desmantelado al menos una decena de células y ha arrestado cerca de medio centenar de terroristas.

| 26/11/2015