Un helicóptero ruso Mi-8 con cinco militares a bordo fue derribado hoy en la provincia siria de Idlib al volver a su base tras llevar ayuda humanitaria a la ciudad de Alepo, informó hoy el Ministerio de Defensa ruso.

“A bordo del helicóptero se encontraban tres miembros de la tripulación y dos oficiales del Centro de coordinación para la pacificación de las partes en conflicto”, explicó a las agencias rusas un portavoz de la cartera rusa.


La información sobre la caída del helicóptero fue adelantado por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que no pudo precisar si sus ocupantes sobrevivieron.

Activistas en internet publicaron en Twitter fotografías del lugar donde se produjo el impacto, donde se aprecia que el aparato quedó totalmente destruido.

Además, en las instantáneas también se ve cómo el piloto es arrastrado por dos hombres que lo arrastran de los tobillos, pero no se distingue si está vivo o muerto.

El Ministerio de Defensa de Rusia ha confirmado la muerte de las cinco personas que iban a bordo del helicóptero militar. “han fallecido heroicamente al tratar de desviar el aparato para minimizar las víctimas en tierra”, ha contado el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.

Casi toda la provincia de Idlib, en el noroeste de Siria, está en manos del grupo terrorista Frente de Fateh al Sham (el antiguo Frente al Nusra) y de otras facciones aliadas como Ahrar al Sham.