El ejército sirio y sus aliados recuperaron terreno en el norte de Alepo, estrechando el cerco sobre el este de la ciudad controlado por grupos terroristas, que está siendo objeto de una gran ofensiva del Gobierno respaldado por Rusia.

La captura del campo de Handarat a pocos kilómetros al norte de Alepo marca el primer avance importante por tierra del Ejército en una ofensiva que “ha desencadenado una intensidad de fuego sin precedentes” contra las posiciones terroristas en los barrios orientales de la ciudad.

La zona capturada, el campo de refugiados palestino “Handarat”, es un terreno elevado desde el que se divisa una de las principales carreteras de Alepo, y uno de los bastiones importantes de los terroristas en el norte de Siria.


“Handarat ha caído”, informó Reuters citando a un oficial de uno de los principales grupos terroristas en Alepo. Un comunicado del ejército confirmó el avance y dijo que había muerto “un gran número de terroristas”.

Una fuente militar en Alepo indicó que “la rápida operación militar para recuperar Handarat ha sorprendido a los terroristas que se quedaron perplejos ante el avance de nuestras fuerzas”.

“La reconquista del campamento permite al ejército asegurar la totalidad de la carretera del Castillo y avanzar hacia las posiciones terroristas en la parte oriental de Alepo”, añadió la fuente.
Residentes del este de Alepo controlado por los terroristas aseguraron que la zona está siendo sometida a los bombardeos más feroces de la guerra.