La policía británica mantiene detenidas a ocho personas por su implicación en la brutal paliza a un refugiado en Londres. El joven agredido se encuentra en estado crítico tras el brutal ataque que la Policía identificó como “crimen de odio”.

Los hechos ocurrieron el viernes por la noche en Croydon, un pequeño municipio a las afueras de Londres. El joven, de 17 años, estaba esperando en una parada de autobús junto a dos amigos cuando cerca de 20 personas de entre 20 y 24 años se les aproximan preguntándoles que de dónde son.


Cuando la víctima responde que es un refugiado kurdo en busca de asilo político, el grupo se lanzó contra él y le propinó una brutal paliza. El joven sufrió graves heridas en la cabeza. Sus dos compañeros lograron escapar, aunque resultaron heridos de carácter leve, según ha podido reconstruir la policía local.

El refugiado kurdo iraní terminó inconsciente en el suelo con una fractura de cráneo y un coágulo de sangre en el cerebro, un grupo de personas se acercó para llamar a una ambulancia que llegó a las 23:41, según los servicios médicos.

“Además de los arrestos, sabemos que un gran número de personas, 20 aproximadamente, estuvieron implicadas en el ataque contra la víctima”, afirmó el inspector Gary Castle, de la Policía Metropolitana en Croydon.

“Ha sido un ataque brutal, el chico tiene graves heridas craneales y faciales después de que un grupo grande de personas le haya pateado la cabeza repetidamente”, explicó el jefe de la investigación de la policía de Croydon, Kris Blamires, quien condenó el ataque.