Reino Unido se enfrenta a la mayor amenaza que hayan presentado “extremistas” que intentan perpetrar ataques masivos, a menudo con tramas espontáneas que requieren apenas unos días para ser ejecutadas, dijo el martes el jefe del servicio de inteligencia MI5.

Después de que cuatro ataques terroristas este año dejaran 36 muertos en Reino Unido, la serie más letal desde los atentados de julio de 2005 en Londres, el jefe del MI5 Andrew Parker dijo que la amenaza está en el nivel más alto que ha visto en 34 años.

“La amenaza es más diversa de lo que yo haya visto jamás: complots desarrollados aquí en el Reino Unido, también otros dirigidos desde el extranjero; planes online, esquemas complejos y groseros ataques con puñal; ataques muy elaborados y otros espontáneos”, dijo Parker.

Entre la planificación y ejecución de los ataques pueden pasar “pocos días”, añadió durante un discurso en Londres. El director general del MI5 raramente realiza discursos públicos. El último fue en 2015.

Los militantes de Daesh en Siria e Iraq están en retirada. El martes perdieron la capital de su autoproclamado califato en la ciudad siria de Raqqa y han sido forzados a retroceder hacia una franja del valle del río Éufrates y el desierto que lo rodea.

Pero a medida que su territorio y riqueza disminuyen, los terroristas han intensificado la propaganda online con la que han ayudado a radicalizar e inspirar a otros activistas para que ataquen civiles en el nombre del Islam a lo largo de Europa, Oriente Próximo y África.

Reino Unido frustró 20 complots en los últimos cuatro años, con siete ataques terroristas frenados en los últimos siete meses, señaló Parker.