Las fuerzas de seguridad afganas liberaron a 67 soldados y policías que permanecían recluidos en una cárcel de los talibanes en la provincia de Helmand, en el sur del país, informaron fuentes oficiales.

La operación para su rescate fue lanzada en el distrito de Baghran y una veintena de los rehenes han sido ya trasladados a la vecina provincia de Kandahar, mientras que los 47 restantes serán llevados allí “pronto”, dijo el Ministerio de Defensa afgano en un comunicado.

La provincia de Helmand es uno de los puntos del país en el que los talibanes tienen más influencia y controlan más territorio, y donde las autoridades llevan a cabo regularmente operaciones para liberar a prisioneros en este tipo de cárceles.