El primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, anunció un plan para reducir el número de tropas pertenecientes a la coalición internacional liderada por Estados Unidos en territorio iraquí.

Al Abadi afirmó que hay en marcha un plan gubernamental destinado a reducir gradualmente el número de fuerzas de la coalición internacional en Iraq, aunque todavía “se necesita la fuerza aérea de ese contingente”, apuntó.

El vocero del Pentágono Eric Pahon aseguró que las tropas estadounidenses pasarían a asesorar y entrenar a los militares iraquíes, pero sin planes para una fuerte reducción de tropas.


Al respecto, el movimiento Badr, una facción armada cercana al gobierno iraquí, denunció que la presencia de tropas norteamericanas será una fuente de inestabilidad.

Los dos gobiernos deberían coordinarse para garantizar una retirada total, pues los militares extranjeros causan polarización interna y constituyen un imán para los terroristas, precisó el vocero de la organización, Kareem Nuri.

También el vocero del movimiento Kataib Hezbolá, Jaafar al Husseini, advirtió que en cualquier momento estalla un enfrentamiento armado entre esa entidad y los estadounidenses.

La presencia militar norteamericana en Iraq no es bienvenida, porque entraron a la fuerza y se mantienen aquí sin permiso, aseveró.