El gobierno sirio exigió a Naciones Unidas que condene la escalada de ataques de grupos terroristas radicados en la región de Ghouta Oriental contra Damasco y sus alrededores.

En una carta dirigida al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, con copia a su Secretaría General, la Cancillería siria denunció que en las últimas horas las bandas terroristas lanzaron más de 40 obuses contra la capital Damasco y sus áreas rurales.

Indicó que tales acciones provocaron la muerte de seis personas y heridas a otras 29, además de causar daños materiales en escuelas, clínicas, establecimientos de servicio público e incluso sedes diplomáticas.

Según la misiva, en las últimas siete semanas las formaciones terroristas lanzaron desde Ghouta Oriental más de mil 500 obuses y proyectiles de morteros contra la capital y sus alrededores, los cuales ocasionaron centenares de fallecidos y heridos, en su mayoría mujeres y niños.


Tras denunciar la escalada de acciones violentas terroristas, la Cancillería advirtió que algunos funcionarios occidentales son participes de los crímenes que cometen los grupos terroristas contra civiles inocentes en Damasco y su campo.

Precisó en la declaración que el Estado sirio tiene derecho a defender a sus ciudadanos y luchar contra el terrorismo y sus patrocinadores, en el marco del continuo complot diseñado por éstos desde hace siete años contra Siria.

Luego de ratificar su pedido al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que adopte medidas contra los países que apoyan el terrorismo, el Ministerio del Exterior de Siria señaló que los atentados contra la población civil no lograrán interrumpir la lucha contra formaciones terroristas.

La fuerte campaña mediática occidental contra las acciones del ejército sirio en legítima defensa de sus territorios, ocurre luego de que las tropas gubernamentales anunciaron la pronta realización de una nueva ofensiva contra las agrupaciones terroristas en Ghouta Oriental.