Las negociaciones para evacuar a los terroristas de Daesh y sus familias de las posiciones que ocupan en el Campamento de Yarmouk y el aledaño barrio de Hayyar Aswad, en las afueras de Damasco, fracasaron.

El ruido de los ataques aéreos ha vuelto a sonar en la capital, proveniente de su puerta sur, con el inicio de las operaciones militares de las tropas sirias contra los remanentes de Daesh, con empleo de aviación, artillería y misiles pesados tierra-tierra.

El objetivo de la ofensiva lanzada este jueves es la erradicación de las agrupaciones terroristas de zonas aledañas a Damasco.


Los ataques se centran en refugios, cuarteles y fortificaciones de los terroristas en el campo de refugiados palestinos Yarmuk y el barrio de Hayyar Aswad, como preludio de una operación terrestre en caso de que los terroristas se nieguen a rendirse o ser evacuados.

Con anterioridad el ejército sirio dio un plazo de 48 horas a los remanentes de Daesh para evacuar esas zonas bajo un acuerdo similar al alcanzado con otras facciones terroristas en Ghouta Oriental y Qalamoun Este.

Según fuentes militares, la decisión de emprender la operación militar se tomó, como medida de presión, para forzar las negociaciones que permitirán salida de los terroristas “sin combates”, tras fracasar la primera ronda de dialogo, pese a que el gobierno sirio “aceptó las condiciones” de Daesh, de acuerdo a la fuente.