Los últimos autobuses con civiles y militares de las localidades de Fua y Kefraya, en el norte de Siria y asediadas por facciones terroristas, entraron en la madrugada de este viernes en territorio controlado por las fuerzas gubernamentales, después de que varios autobuses hubieran sido bloqueados por un grupo armado en el paso de Al Eis.

La agencia oficial siria, SANA, confirmó que unos 18 autobuses con los últimos habitantes de ambas localidades llegaron a los centros de acogida que las autoridades han dispuesto en Alepo, la principal ciudad del norte de Siria.

Según se había informado ayer, al menos 23 autobuses que trasladaban a 900 civiles y militares, de los 6.900 evacuados de Fua y Kefraya, habían sido retenidos por miembros del grupo terrorista llamado “Ahrar al Sham” para exigir la liberación de más “prisioneros” pertenecientes a ese grupo.

El avance de hoy se produjo en paralelo a la entrada a zona controlada por bandas armadas de cuatro autobuses con “combatientes liberados” que se encontraban detenidos por las autoridades sirias.

Los miles de civiles que estaban asediados por facciones terroristas en esas dos localidades fueron trasladados a Alepo e ingresados en centros de residencia temporal, donde se les ofrece alimentos y todo tipo de servicios médicos.

Anteriormente, 13 personas enfermas de los asediados poblados han sido ingresadas en hospitales de la ciudad de Alepo para que reciban tratamiento médico.