El ejército de ocupación israelí ha decidido reforzar la presencia de sus tropas “a gran escala” en la región sur de Palestina ocupada, en la frontera con la Franja de Gaza, donde en las últimas semanas se convocan protestas casi diarias y donde en la última semana han muerto nueve palestinos por disparos israelíes.

“Tras una evaluación de seguridad celebrada esta mañana, el jefe del Estado mayor, general Gadi Eisenkot, y oficiales de alto rango del ejército y la Agencia de Seguridad (de la entidad sionista) han decidido enviar refuerzos a gran escala del ejército en el Comando Sur en los próximos días”, informó un comunicado militar.

Las fuerzas de ocupación mostraron su determinación de “impedir la actividad terrorista y evitar infiltraciones desde la Franja de Gaza”, según su expresión, y advirtieron de que el ejército “está preparado para una gran variedad de escenarios”, al tiempo en que insistieron en responsabilizar al movimiento Hamas de todo lo que ocurre en Gaza.

El pasado 30 de marzo los palestinos comenzaron la Gran Marcha del Retorno en Gaza, con movilizaciones masivas para pedir el derecho al regreso de los refugiados y el fin del bloqueo israelí impuesto sobre el enclave costero desde 2007.

En estos seis meses, 194 palestinos han muerto en las manifestaciones o en incidentes violentos junto a la frontera, y otra docena ha perdido la vida en bombardeos israelíes contra instalaciones en Gaza.