Los venezolanos exigieron el cese de las sanciones económicas, políticas y diplomáticas contra la nación con una marcha multitudinaria que se desplegó por el centro de la ciudad, con Chávez como estandarte, un líder antiimperialista que aún está vivo en el corazón de los venezolanos.

La manifestación partió este viernes desde la avenida Los Ilustres del municipio Libertador, en Caracas, hasta el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno Bolivariano.

En el camino hacia el Palacio de Gobierno, los manifestantes respaldaron a Nicolás Maduro y su llamado al diálogo.

En las afueras del Palacio de Miraflores, el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, aseguró que Venezuela no pide que le regalen nada, ni que abran un canal humanitario, sino que el imperio levante las sanciones que impiden la compra de medicinas y alimentos para el país.

“No le pedimos a nadie que nos regale nada, exigimos ante el mundo que cese el bloqueo contra Venezuela y nos permitan comprar alimentos y medicinas en cualquier parte del mundo”, denunció ante la movilización.

“Los pueblos tienen el derecho a su autodeterminación y soberanía; no necesitamos de aquellos que se creen policías del mundo”, dijo además.