El Volcán de Fuego, ubicado en el sur de Guatemala, ha entrado de nuevo en erupción y ha provocado ya las primeras evacuaciones en las zonas aledañas, ante el temor a que la actividad eruptiva y la sísmica aumente en las próximas horas y se eleve por tanto el riesgo.

La montaña ya fue escenario de una potente erupción a principios de junio que provocó casi 200 muertos y arrasó una comunidad cercana. El temor se repite ahora tras el incremento de la actividad en el Volcán de Fuego durante la noche del domingo al lunes.

Así lo ha constatado el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), que ha recomendado a la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) aplicar mecanismos de alerta en las inmediaciones. Las columnas de ceniza alcanzan ya los 5.000 metros y están ya dispersas por un radio de unos 2,5 kilómetros.