Un grupo de hombres armados ha matado esta semana a más de 40 civiles tuaregs en el norte de Malí, escenario de frecuentes combates por el control de la tierra y el agua, según ha informado el alcalde de la localidad de Ménaka, que ha confirmado ataques durante dos días consecutivos.

“Hombres armados en motocicletas atacaron varios campos nómadas en Tinabaw”, ha explicado el alcalde, Nanout Kotia, en declaraciones a la agencia Reuters. “Dispararon indiscriminadamente contra la población”, ha añadido.

Kotia, que ha confirmado el envío de fuerzas de seguridad a la zona, ha cifrado en 43 los tuaregs que perdieron la vida en estos ataques, ocurridos a unos 20 kiómetros de Ménaka. Los Movimientos de Coordinación del Azawad, el principal grupo separatista, ha elevado a 47 las víctimas mortales.