Iraq se alzará en armas y defenderá a Irán en caso de una invasión de EEUU

Iraq está al lado de Irán y lo defenderá en caso de una invasión de Estados Unidos al país vecino, afirma un comandante de las fuerzas populares iraquíes.

“Los iraquíes nunca olvidarán los sacrificios de la República Islámica de Irán cuando envió a sus asesores militares, armas y equipos para sacar a Daesh, mientras, la mayoría de los países que tenía una alianza militar estratégica con Iraq, incluido Estados Unidos, nos dejó solos, por eso, los iraquíes se alzarán en armas para defender a este vecino islámico”, señaló Yabar al-Mamuri, un comandante de Al-Hashad Al-Shabi (Movilización Popular).

En una entrevista publicada hoy jueves por la agencia iraquí Bagdad al-Youm, el también jefe de la Asociación de Clérigos Musulmanes de Iraq criticó las políticas del presidente de EEUU, Donald Trump, y tildó al mandatario republicano de un “tonto” que está llevando al país norteamericano hacia el abismo.

Al-Mamuri aseguró que cualquier acción contra Irán creará un “tsunami” en Oriente Medio y afectará a los intereses estratégicos del mismo Estados Unidos.

El clérigo iraquí arremetió contra las autoridades estadounidenses por desarrollar durante mucho tiempo una estrategia para crear grupos terroristas en la zona con el objetivo de difamar el Islam, y afirmó que el mundo está consciente de la falsedad de las proclamas de Estados Unidos en la lucha contra el terrorismo.

Los iraquíes han expresado reiteradas veces que apoyarán a los iraníes ante las amenazas de EEUU. Tras un viaje secreto que hizo Trump el pasado diciembre a Iraq, donde lanzó sus amenazas a Irán, muchos grupos iraquíes, junto al Gobierno de este país, tomaron una postura muy fuerte contra el magnate neoyorquino.

Las autoridades iraquíes, frente a las presiones de EEUU, defienden con uñas y dientes sus relaciones con Irán, y han asegurado que Bagdad “no participará en el régimen de sanciones” extraterritoriales reimpuestas por Washington a Teherán, además de que han dejado claro que su país no se convertirá en una plataforma desde donde la Casa Blanca pueda atacar a Irán.