El régimen de Bahréin ejecuta a dos activistas pro derechos humanos

El régimen de Bahréin ejecutó a dos ciudadanos jóvenes pese a constantes llamadas desde organizaciones pro derechos humanos para frenar el fallo de muerte contra ellos.

El disuelto partido opositor Al-Wefaq confirmó que las autoridades bahreiníes ejecutaron en la mañana de este sábado a los jóvenes Ahmad al-Mulali, de 24 años, y Ali Hakim al-Arab, de 25 años, y que el régimen de Al Jalifa se niega a entregar los cadáveres a sus familiares para que sean enterrados como es debido.

Los dos activistas ejecutados han sido detenidos el 9 de febrero de 2017 y sentenciados a la pena capital el 31 de enero de 2018 “por terrorismo”.

Varias organizaciones de derechos humanos habían denunciado “irregularidades” durante el juicio y que los dos “inculpados” habían sido torturados durante su detención a manos de los agentes penitenciarios del régimen de Al Jalifa.

La ejecución de estos dos activistas que protestaban contra las políticas del régimen bahreiní es un eslabón más en la larga cadena de la represión que se ejerce contra los opositores.

En enero de 2017, tres activistas chiíes fueron ejecutados por su presunta implicación en un atentado que en 2014 causó la muerte de tres policías, y más de un año después, en abril de 2018, un tribunal militar confirmó la condena a muerte de seis activistas chiíes, después de condenarlos por cargos que incluyen “conspiraciones contra el país”.