El Presidente sirio saluda la victoria en Alepo y asegura que la batalla continúa para liberar Idlib

El presidente sirio, Bashar Al Assad, saludó la victoria en Alepo y la firme resistencia y sacrificios de sus compatriotas y al Ejército, en una comparecencia especial ante la televisión nacional.

“Cuando la ciudad de Alepo fue liberada a finales del 2016, yo dije que Alepo después de la liberación no será nunca como antes, y tenía la plena fe que el patriotismo de la gente de Alepo y su lealtad a la patria y al ejército alterarán las cuentas de los enemigos, y esto fue lo que sucedió”, expresó.

“Con cada proyectil traicionero que caía, la esperanza de los enemigos aumentaba para convertir a Alepo en otra ciudad que nunca existió a lo largo de la historia y para que no forme con su gemelo Damasco las dos alas con las que la patria pueda volar”, precisó Al Assad.

Nuestro Ejército Árabe Sirio no dejará de cumplir sus deberes nacionales, y solo será como fue siempre un ejército del pueblo y para el pueblo, subrayó Al Assad.

“La historia nunca conoció a un ejército victorioso que no sea con la unidad del pueblo en su batalla y esto fue lo que vimos en Alepo y otras ciudades sirias cuando abrazó al ejército, que por su parte lo defendió y se sacrificó por él”, indicó el presidente.

“Esta liberación no significa el final de la guerra, ni la caída de los planes o la desaparición del terrorismo, ni la rendición de los enemigos, pero ciertamente significa humillar a los enemigos y será el preludio para su derrota, tarde o temprano”, aseguró.

En su alocución saludó a los hermanos, amigos y aliados que “estuvieron hombro a hombro con el ejército en el campo de batalla y como águilas protectoras en el cielo, y su sangre se mezcló con la nuestra para purificar la tierra de Alepo”.