Los sanitarios belgas reciben de espaldas a la primera ministra Sophie Wilmès

Las tensiones por la gestión del Covid-19 empiezan a emerger en las democracias europeas. Además de las manifestaciones en España y Reino Unido, los sanitarios de Bélgica han decidido mostrar su rechazo al Gobierno con una protesta silenciosa pero muy simbólica.

A la primera ministra Sophie Wilmès, del partido liberal francófono, que lleva menos de un año en el cargo, el personal médico la recibió fuera de su hospital, el Saint-Pierre, haciendo un pasillo humano de espaldas y en silencio.

Entre el personal que recibe de esa forma gélida a la primera ministra encontramos enfermeras, doctores, auxiliares, celadores y conductores de ambulancias. Las reivindicaciones del personal sanitario no son nuevas: el sector mostró su desacuerdo hacia los últimos decretos del ejecutivo belga, ya que consideran que están haciendo un esfuerzo sobrehumano con plena disponibilidad. Por eso reclaman “una revalorización de la profesión”.

Wilmès, cuya visita duró aproximadamente 40 minutos, prometió que las condiciones de estos trabajadores “mejorará” tras la pandemia.