Espiral de violencia sacude EEUU: dos muertos y 1400 detenidos

La muerte de George Floyd a manos de la policía el lunes se ha convertido en el último símbolo de la violencia policial contra los ciudadanos negros y ha provocado la mayor ola de protestas de los últimos años en Estados Unidos.

Enfrentamientos entre manifestantes y policías sacudieron el sábado por la noche varias grandes ciudades de Estados Unidos, a pesar de los toques de queda decretados en una 25 ciudades principales del país para detener las protestas.

Durante las movilizaciones callejeras, que se han intensificado, la Policía ha detenido desde el jueves a 1383 manifestantes en 17 ciudades, según la agencia Associated Press (AP).

El medio norteamericano, no obstante, cree que el número real de detenidos puede ser mayor.

Los tiroteos registrados la noche del sábado en Indianápolis, capital del estado de Indiana (centro-este), provocó la muerte de un manifestante, según reconoció el jefe de la Policía de la ciudad, Randal Taylor, en una rueda de prensa. Taylor no ofreció mayores detalles sobre la víctima.

Los tiroteos acaecidos el viernes en la ciudad Detroit, en el estado de Michigan, en medio de unas manifestaciones, también se cobraron la vida de un joven de 19 años.

En medio de esta dramática realidad, el presidente de EEUU, Donald Trump, asegura que “criminales de extrema izquierda” están detrás de las protestas desatadas por el asesinato de Floyd.