La violencia ha causado más de 500 muertos en la ciudad siria de Sweida

La cifra de muertos en la provincia de Sweida, en el sur de Siria, ha llegado a las 516 desde la mañana del domingo 13 de julio, como consecuencia de los enfrentamientos entre fuerzas gubernamentales sirias y combatientes de la región, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, además de ejecuciones sobre el terreno y bombardeos sionistas, en momentos en que las repercusiones de los acontecimientos de Sweida continúan a pesar del anuncio del acuerdo de alto el fuego.

En detalle, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos obtuvo un video y fotos que documentaban la ejecución sobre el terreno de tres civiles beduinos en la ciudad de Sweida, incluyendo un niño y una mujer, en medio de la escalada de tensiones sectarias, y llamamientos de los residentes para protegerlos de represalias y violaciones, especialmente en el barrio de Al-Maqous.

En un contexto relacionado, las fuentes del Observatorio Sirio indicaron que las “facciones locales” dieron a la gente de las tribus beduinas hasta el jueves por la tarde que abandonara el barrio de Al-Maqous en la ciudad de Sweida.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos documentó 56 casos de ejecuciones sobre el terreno de civiles de la comunidad drusa, cuyos cuerpos fueron encontrados en diferentes calles y vecindarios dentro de la ciudad y su campo.

El Observatorio Sirio también informó de un aumento del desplazamiento de familias de las tribus beduinas en varias zonas de la provincia de Sweida. Según la información recibida, el desplazamiento incluía muchas zonas y barrios habitados por estas familias, en momentos en que fuentes fidedignas informaron, según el Observatorio, que hombres armados asediaban barrios habitados por ciudadanos de las tribus beduinas.

Las tropas gubernamentales sirias se desplegaron en Sweida el martes con el objetivo declarado de calmar los enfrentamientos iniciados el domingo entre combatientes drusos y tribus beduinas locales. Hasta entonces, la ciudad había estado bajo control de fuerzas drusas.

Oenegés, testigos y grupos drusos acusaron a las tropas gubernamentales y a los grupos aliados -entre ellos las tribus beduinas- de numerosos abusos, incluidas ejecuciones arbitrarias.

Ante este contexto, el presidente interino sirio, Ahmed al Sharaa, ordenó el jueves el retiro de sus tropas de Sweida y cedió la seguridad a los drusos. Lo hizo, según dijo, para evitar “una guerra abierta” con la entidad sionista, luego que el régimen israelí bombardeara lugares gubernamentales y amenazara con intensificar sus ataques si no abandonaban la región sureña.