El prisionero liberado, Ahmed Maatouk, recuperó su libertad después de estar más de un año prisionero en manos del grupo terrorista Daesh, gracias a un acuerdo alcanzado en agosto pasado y que permitió además “desalojar” a los terroristas de la frontera sirio-libanesa.

Maatouk llegó la mañana de este jueves a su pueblo natal, Sir al Gharbie, y fue recibido con júbilo por una multitud que se agrupó en un ambiente festivo.

“La alegría de la segundo liberación se completó”, dijo uno de sus familiares, en alusión a la expulsión de los terroristas del territorio libanés. La primera liberación fue en mayo del 2000 cuando las fuerzas sionistas se retiraron del sur de Líbano “humillados y derrotados” por la Resistencia.

Hezbolá anunció que había recuperado de Daesh el combatiente prisionero y que entraba a Líbano por el paso fronterizo de “Yusi” a primeras horas de la madrugada.

En un discurso de su ciudad natal, Maatouk saludó a los mártires y al Secretario General de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasrolá, dando alabanzas a Dios por la bendición de la libertad y de la salvación.

“He prometido estar donde tenga que estar, junto con mis hermanos en la Resistencia Islámica”, dijo.

“Gracias a Dios y a los mártires maestros del convoy de la existencia y la victoria”, añadió.

Los autocares y vehículos que trasladaban a los miembros de Daesh y sus familiares, procedente de la frontera con Líbano, cruzaron a la provincia de Deir Ezzor el miércoles tras días de estar varados en el desierto por los ataques aéreos de la alianza que impedían su avance.

El pacto negociado por Hezbolá accedió a la evacuación a cambio de la ubicación de los restos de soldados libaneses y la liberación de combatientes.